El rescate y la protección animal juegan un papel fundamental en la conservación de la biodiversidad, por eso hoy queremos platicarte sobre una asociación que ha sido protagonista de estos temas en nuestro Estado.
Se trata de Mi Amigo de la Calle, una Asociación Civil que no solo rescata, cuida y preserva especies animales, sino que con su trabajo ha logrado impactar de manera profunda en la salud de los ecosistemas, la ética, el bienestar humano y la construcción de una comunidad compasiva.
Antecedentes
Esta Asociación Civil nació en el 2014 como un colectivo encaminado a desarrollar estrategias para combatir la sobrepoblación canina y felina en las zonas vulnerables de la Riviera Maya.
Al principio, Mi Amigo de la Calle se enfocó en campañas de esterilización, vacunación y educación en comunidades mayas, sumando ya ocho exitosas cruzadas a la fecha.
Resultado de esas operaciones, más de 3000 perros y gatos y más de 1500 familias han sido beneficiadas.
Mi Amigo de la Calle también organiza actividades culturales y educativas para que, cada año, miles de chuchos y gatitos sean acogidos bajo protocolos que garanticen adopciones responsables.
Hoy en día, los hogares temporales son parte integral de la estrategia de Mi Amigo de la Calle pues en el largo plazo tienen contemplado culminar con un Centro de Rescate Sustentable que es, de hecho, uno de sus proyectos clave.
Rescates
Los rescates de Mi Amigo de la Calle no se limitan a perritos, sino que se extienden a fauna silvestre y principalmente a especies pequeñas de mamíferos, aves y reptiles.
Aquí, gracias a la coordinación con el Consejo Estatal de Bienestar Animal, Mi Amigo de la Calle ha recuperado, rehabilitado y liberado más de 4000 ejemplares de diferentes especies, entre las que destacan: zarigüeyas, musarañas, mapaches, coatíes, serpientes, venado cola blanca, garzas, zanates, tortugas terrestres y búhos pigmeos, entre otras.
Solidaridad
El apoyo a la sociedad también es importante para Mi Amigo de la Calle, por eso ante catástrofes naturales como huracanes, terremotos u otro tipo de emergencias, siempre ha estado dispuesto a ayudar.
En 2017, por ejemplo, el colectivo unió esfuerzos con la comunidad local logrando reunir para apoyar a los afectados por los terremotos de ese año, nada menos que 7 toneladas de artículos y despensas.
Y no solo reunió la ayuda, sino que se encargó de enviarla y distribuirla a seis localidades damnificadas de los estados de Morelos y Oaxaca.
Empatía y concientización
Paralelamente, Mi Amigo de la Calle ha realizado ayudas puntuales en el Hospital General de Playa del Carmen recaudando juguetes y cenas en épocas Navideñas, que sirven para reconfortar pacientes y familiares que atraviesan por momentos difíciles.
Tal vez incluso te los encuentres en escuelas públicas o privadas, o en empresas y hoteles a los que regularmente acuden para difundir información científica que ayude a generar mejores hábitos y conductas hacia el entorno y los animales.
Como ves, la labor que Mi Amigo de la Calle ha realizado estos años ha sido esencial para el mejoramiento de las condiciones de muchos animales y también para la asistencia de muchas familias quintanarroenses, mexicanas y hasta extranjeras.
Si te interesa ayudarlos a crecer, aquí te compartimos la forma de hacerlo:
DONATIVOS:
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Mi Amigo de la Calle AC:
CLABE 036694500356024555
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4213166140555339
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